Por el H. Luis Carlos Gutiérrez Blanco, Vicario General del Instituto Marista y miembro de la comisión de actualización del documento.
REVISTA VOCES DE PROVINCIA \ BLOG IV | VOZ EXPERTA
Estamos ante un documento dirigido a todo el mundo marista, un documento que hemos trabajado con mucho cariño y que busca cuestionarnos sobre cómo vivimos la misión marista hoy en día, en el contexto de nuestras realidades locales.
Durante su proceso de actualización hemos vivido un camino muy bonito de reflexión, de redacción y también de validación. Este proceso fue compartido con muchas personas del mundo marista y varios expertos. Es por ello que podemos afirmar que es un documento que crece con un corazón muy marista, forjado por nosotros y para nosotros, que no está hecho solo de teorías, sino también de la experiencia y de los sueños que tenemos como maristas de Champagnat.
En un primer momento tuvimos que decidir si deseábamos hacer un documento completamente nuevo o actualizar el de 1998 y nuestra reflexión se inclinó desde el primer momento por conservar lo mejor del documento del 98 pues tiene un alto valor y una gran riqueza y nos ha guiado durante estos 25 años en la misión marista, y decidimos nutrirlo con todo lo que en estos 25 años hemos ido acumulando de sabiduría, de experiencia, de nuevos documentos y de nuevas realidades que estamos afrontando hoy como maristas en este mundo contemporáneo y desde ahí, tratar de proyectarnos de cara al futuro
El documento trata de responder a estas dos preguntas: ¿Cómo comprendemos y explicamos la misión educativa marista hoy? Y ¿cómo visualizamos la misión educativa marista desarrollándose en el futuro? Por lo que, el documento tiene una dimensión constructiva, compasiva, innovadora y fiel a la tradición invitándonos a encarnar y hacer vida la misión del Instituto de dar a conocer a Jesucristo y hacerlo amar, teniendo a la educación como nuestro principal medio de evangelización.
La misión marista incluye a los niños, niñas, adolescentes y jóvenes, y con ellos queremos explorar nuevas fronteras educativas y evangelizadoras, para ofrecer a nuestra sociedad, buenos cristianos y buenos ciudadanos, con visión de servicio y fraternidad, ahí está nuestro principal apostolado y servicio.
Además, este documento nos empodera en nuestro modo marista de educar, desde nuestras características propias de la pedagogía marista: la construcción de una sociedad desde el espíritu de familia, forjando relaciones fraternas y con sencillez, al estilo de María, acompañando con una presencia cercana a nuestros educandos y formándoles en el esfuerzo mediante el amor al trabajo bien hecho y a tiempo.
Esta actualización del documento va más allá de nuestros tres campos tradicionales de misión: las escuelas, las obras sociales y las universidades, pues, siguiendo la expresión del Hno. Ernesto, superior general, “miramos más allá” y se nos propone una visión hacia el futuro con una serie de novedades importantes que significan la actualización de lo que hacemos como educadores, evangelizadores y como personas solidarias en la misión:
Se han actualizado las fuentes históricas.
Sa han actualizado el acercamiento a Marcelino Champagnat, su perspectiva geográfica.
También las perspectivas cristológicas y mariológicas del documento.
Se han actualizado las tendencias educativas y evangelizadoras principales.
Se ha trabajado la inclusión y el desarrollo de la gestión y liderazgo educativo.
Se ha consolidado el camino compartido en la misión y en la vida marista de las diferentes vocaciones maristas.
Se ha reintegrado la evangelización y la atención a los más vulnerables y sus nuevas fronteras.
En conclusión, este documento nos invita a sentirnos todos y cada uno, hermanos, laicos, laicas, niños, jóvenes, familias y comunidades a ser partícipes en una misión vibrante que espera iluminarnos y ayudarnos por los siguientes años y queremos que esta experiencia no solo sea reflexiva, sino realmente sea una experiencia apasionada para actuar y vivir la misión hoy, con el mismo impulso de Champagnat, pero con las claves de nuestro tiempo y de nuestras sociedades.
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